Nymphomaniac. Volumen 1 y 2

(Dirigida por Lars Von Trier – Dinamarca 2013)

 Nuestro gran tormento en la vida proviene de que estamos solos y todos nuestros actos y esfuerzos tienden a huir de esa soledad.

– Guy de Maupassant (Escritor Francés)

Triste, así termina uno luego de ver los volúmenes 1 y 2 de Nymphomaniac. Von Trier es un pesimista de los grandes. Durante 4 horas no nos da un halo de esperanza.

Joe (Charlotte Gainsbourg) es una ninfómana que cuenta la historia de su vida a un tipo desconocido, Seligman (Stellan Skarsgard), luego que este último la encontrara tirada y ensangrentada en un callejón y la llevará a su casa para curarla y cuidarla.

El filme se sostiene en los diálogos de Joe y Seligman. Y es que el tema principal no es solamente el sexo como quizá muchos pensarían, Von Trier muestra una sociedad con gente abrumada por la soledad, la violencia, la rebeldía, la falta de compromiso, la insuficiencia de la fuerza de voluntad, la carencia de sentimientos hacia los demás, el buscar solo el placer propio. Quieren ser buenas personas pero como bien dice el personaje de Joe: “Soy solo un mal ser humano”.

Quiero destacar algo del cine de Von Trier, sus películas tienen la particularidad especial de estar siendo testigos de una novela en movimiento. Él escribe su “novela” y la transforma en película. Mientras que muchos novelistas buscamos que cada lector imagine el mundo que nosotros relatamos y existan al final miles de películas mentales acerca de nuestra novela. Von Trier apuesta por hacer filmes de sus “novelas” (así entre comillas) para que tengamos su exclusiva versión en nuestras mentes. Ojo eso no significa, finalmente, que no tengamos cada uno nuestra particular visión de lo presentado en la sala de cine.