(Dirigida por Ticoy Rodríguez – Perú/Chile/Argentina 2015)
Aníbal (Felipe Izquierdo) es docente en una escuela chilena, que al igual que todo el país, vibra con el mundial de fútbol Brasil 2014. Desde la primera escena presumimos que algo anda mal entre él y su esposa, ella no tiene esa ternura de los amores sostenidos y que se clavan en el tiempo como una estaca, en suma, de los que son inquebrantables. Al parecer lo de ellos ya no funciona.
Rolo (Pablo Granados) trabaja como taxista en Buenos Aires, le gusta conversar con los pasajeros de todos los temas, hay uno que lo apasiona: el descubrimiento de América por los vikingos. Eso de Cristóbal Colón es puro cuento para él. Al igual que Aníbal las cosas con su mujer están re mal, solo el hijo que tienen en común es lo único que los mantiene ligados en cierta forma.
Edgar (Carlos Alcántara) labora para una empresa de negocios turbios donde existe un problema de robo de dinero. La dueña (Gaby Espino) cree que Edgar es el culpable, por lo que decide “actuar” respecto a él. A diferencia de Aníbal y Rolo, nuestro amigo peruano no está casado ni en una relación, para él va más aquello de estar sin compromiso y vivir en una eterna adolescencia.
Estos tres hombres entrecruzan caminos con los rollos particulares de sus vidas e inician una gran amistad.
Me encantó la película de principio a fin. Esas escenas de Pablo Granados en Buenos Aires haciendo de taxista y conversando con sus clientes, recordé una situación similar que viví cuando viajé a la Argentina. En todo caso las situaciones que se observan de Felipe Izquierdo en Santiago si me intrigan (quiero conocer Chile). En el caso de Lima, bueno es mi lugar de nacimiento así que conozco la idiosincrasia por la que pasa el personaje de Carlos Alcántara.
La cinta nos muestra el tema de la amistad peruano-chilena-argentina, me gusta como ha sido abordada de una manera madura y bien llevada. No soy de ver televisión (solo fútbol ), así que para mí Pablo Granados y Felipe Izquierdo eran caras nuevas. Sus actuaciones muy bien, inclusive en ciertos momentos conmueven porque el guión lo requiere y la historia lo necesita. No basta con hacernos reír, también es importante hacernos pensar en la hermandad entre los países y en la misma confianza que se debe generar a partir de la amistad entre las personas. Alcántara va afianzándose en el trayecto de la historia hasta consolidarse finalmente. Llega un momento que uno disfruta la película a tal punto que se siente un cuarto amigo de Aníbal, Edgar y Rolo.
Información del Autor: David Elías Cotos Espinoza (Lima, 1978). Estudió Economía en la UNALM. Formó parte de la Antología de cuentos “Letras en la piel” publicada el 2006 en Lanús, Argentina. Desde el 2007 escribe una serie de blogs sobre cine, entre los que destaca “Cine para usar el Cerebro”, con el cual el 2012 gana en España el Premio Internacional a Mejor Blog de Cine y Televisión organizado por el Diario 20 minutos. Recibe también la Marca Perú (licencia de uso) por el Proyecto Observando Cine. Ha publicado siete libros en Amazon, convirtiéndose “El amor es como un pan con mantequilla” el de mayor suceso (Best Seller Abril 2013).
Nury dice
Tiene muy buena pinta. A ver si llega a las salas de por aquí y tenemos oportunidad de verla.
Saludos.
charo dice
Me ha gustado tu reseña sobre esta película, espero la pongan por aquí.Saludos
Esteban lob Levi dice
Me interesaré por saber de la película, que gracias a tu artículo, la presume muy cercana.
Abrazo.
Ricardo Tribin dice
Reciban tu y los tuyos mis sinceros deseos por unas maravillosas navidades y un 2016 pleno de bienaventuranzas
SOL da Esteva dice
Me parece um bom Roteiro de costumes. Notável a parceria entre Países. Apetecível para ver se passar por Portugal.
Aproveito para te saudar e desejar um Santo e Feliz Natal.
Abraço
SOL