(Dirigida por Alfred Hitchcock y escrita por John Steinbeck – Estados Unidos 1994)
En el lapso de tiempo entre obras como Shadow of a Doubt y Spellbound, el maestro Alfred Hitchcock filmo una de sus cintas más subestimadas y olvidadas de su filmografía. Claro está, sin actores de renombre ni guiones soberbios, ni tampoco el aspecto que ya a esa altura presentaba el nombre de Alfred Hitchcock, sinónimo de suspenso, misterio y ansiedad. Ah, y oscuridad.
La trama enmarca un barco norteamericano que es derribado por un submarino alemán. Los supervivientes logran refugiarse en un pequeño bote salvavidas: los supervivientes son una periodista de moda, Constance Porter (Tallulah Bankhead), un ingeniero (John Hodiak), un industrial adinerado (Henry Hill), una enfermera (Mary Anderson), un marino herido (William Bendix), un camarero (Canada Lee) y una mujer inglesa (Heather Angel) que lleva en brazos el cadáver de su hijo. La situación se hace más compleja con la llegada al bote de un capitán alemán, quien fue el encargado de derribarlos exitosamente.
Rodada en 1944, con guiones de Steinbeck (Viva Zapata) y Jo Swerling (Leave Her to Heaven), la trama se desarrolla rápidamente y presentando tintes tanto psicológicos como existencialistas. ¿8 personas a bordo de un bote en medio del océano, sin nada alrededor y luchando entre ellos para ver quien lidera y quien obedece?, el existencialismo se hace presente en este nudo.
Los efectos son excelentes para su época, lo mismo para los encuadres y la iluminación que son totalmente importantes para escenas donde solo el sol debería iluminar. El guion se puede resaltar como el aspecto más simple y leve de la historia, y fallido incluso, queriendo mostrar discursos surrealistas donde no se puede distinguir las intenciones. El final es aburrido, totalmente aburrido, pero no logra opacar al resto de la cinta.
Para cerrar el texto, se trata de un drama entretenido, pero solamente gracias a la ambientación, los efectos y las actuaciones de la sobresaliente pero no mejor Tallulah Bankhead. Para su época, es genial, porque presenta algo innovador en la cinematografía como es el asunto de personas a la deriva en un bote. También es un punto a resaltar el capitán alemán y a la crítica presentada subliminalmente al pensamiento e ideología nazi.
Para finalmente dar por cerrado el asunto, también es algo remarcable la influencia que esta película ejerció sobre proyectos contemporáneos tan importantes como la serie de J.J. Abrams, Lost. Intento de provocación de Sir Alfred en los últimos años de la tan recordada Segunda Guerra Mundial.
Información del Autor: Ash Lorenzen, cinéfilo, cineasta, crítico y autor. Idealista del cine en todas sus facetas, la escritura, la pintura y la música. Imperfecto, autodidacta, ambiguo y perfeccionista. Aficionado a las pinturas de Van Gogh y Monet, la literatura de Rimbaud y Casona, las cintas de Kubrick, y la atmósfera de The New York Dolls. Cursó seminarios de arte, pintura, actuación y literatura francesa. Su blog “She turns me on and all my violence is gone” reseña y aprecia obras relacionadas a la cinematografía y a sus autores. Produciendo e idealizando su próximo proyecto cinematográfico, y en proyecto de publicar su primer novela.
Manderly dice
Es lógico que por tratarse de una película del maestro Alfred Hitchcock siempre esperemos algo grande. Quizás ésta no sea tan grande pero a mi me ha gustado. Es difícil mantener el interés del espectador en un espacio físico tan reducido y Hitchcock lo logra… con cameo y todo!!
Saludos.
charo dice
Esta película tiene que estar muy bien y quisiera verla.Saludos
Ricardo Tribin dice
Sin duda ninguna es excelente.
Ayer vi Gatsby con DiCaprio y me encanto.
Un abrazo.
Carolina dice
Gracias por la orientacion, nunca la vi pero eso debe ser resuelto muy pronto. No quiero perderme una trama tan interesante.
Saludos.
plared dice
La verdad es que naufraga al intentar presentar personajes complejos con ansias metafísicas. Diálogos absurdos y moviéndose en un terreno que no es el suyo.
Vamos que un toston, pero a los genios, pues se les perdona esas reivindicaciones que de vez en cuando les salen para dar lustre a lo que no lo necesita. Cuiidate